La música, la mejor medicina

Crear: 05/29/2018 - 12:06

Reconozco que se acaba el mes de mayo y me embarga la alegría. Parece que con este mes también se van la alergia y los problemas primaverales. Para celebrar tal emotivo suceso pienso en un concierto. Es domingo, el último del mes, y el mítico local murciano La Boca del Lobo es el único que programa tales eventos para acabar la semana de la mejor manera. Su gerente, David Cuenca, siempre acierta con los grupos que lleva para deleite del público. Entro al local a la hora señalada y en el escenario veo un número concreto de instrumentos que me dicen que esa noche tocaba trío.

El cantante argentino Iván Hechicero estuvo acompañado para la ocasión por el experto bajista José Vicente Nicolás y por el preciosista guitarrista solista Juan Iborra. En casi dos horas de show desgranaron el nuevo disco, aún inédito, de Hechicero “Bocanada de aire” (Autoproducido, 2017). Grabado en los estudios PM bajo la batuta de Pepe Moreno. Una suerte de rock y blues. Con el estilo de Iván y los suyos, con cierto sabor añejo pero con la cadencia de los nuevos tiempos. Los presentes esperamos su pronta publicación.

Como buen músico curtido en bares y carretera, Iván sabe a quién tributar un homenaje. Y lo demuestra con soltura al interpretar Lili Malone (de la banda Riff), Juntos a la par (de Pappo) y Jugo de tomate frío (del grupo Manal). Pero antes de ese repaso por la música rock argentina, José Vicente toma el mando del micro. Los otros dos músicos bajan del escenario y lo dejan tocando y cantando. Sólo alguien con tanta experiencia se atreve con Pacto entre caballeros, de Joaquín Sabina; voz, bajo y la pandereta al pie. Así se demuestra lo grandes que son los músicos y este bajista hace mucho que lo demostró. Nadie lo puede dudar.

Con el público metido en el bolsillo casi desde el primer riff, Iván, Juan y José Vicente continúan dando toda una lección de rock y blues sin paliativos. Cada canción es coreada por el público sin remordimientos ni dudas. Así se festeja un buen concierto como este. Sobre todo porque el músico argentino es de esos artistas que hace un concierto cada tres o cuatro semanas. Consiguiendo que cada show sea diferente y expectante.

Para acabar, visitas a unos clásicos del desamor y los bares Un hombre bueno y Tú me estás atrapando otra vez, con Juan Iborra tocando el cielo con su guitarra en cada uno de los solos que acompañaban las canciones.

Finaliza el show, salgo del local ya de noche y sin alergia primaveral. Afirmo entre los pasos que me llevan a casa: La música es la mejor medicina.