Este pasado viernes la banda murciana Maestro Espada publicó su primer disco, el homónimo Maestro Espada, que promete ser uno de los proyectos más interesantes del panorama musical de nuestro país.
Maestro Espada son dos voces que crecieron cantando juntas y que se reencuentran ahora en el acento y el imaginario de su huerta natal para brindar un disco debut producido por Raül Refree (Rosalía, Lee Renaldo), que pasa con destreza del ruidismo a la intimidad y del pasado al futuro; de las antiguas cuartetas sostenidas por la memoria y la tradición oral, a los versos propios y los sorpresivos paisajes sonoros creados en sesiones de grabación a lo largo de tres años.
Los hermanos Alejandro y Víctor Hernández alumbran en Maestro Espada un emocionante collage de delicada factura electrónica y eminente sentido pop. El de los murcianos es un juego de contrastes único que permite compatibilizar con naturalidad la evidente vocación subversiva con el respeto reverencial. Un disco equilibrado y coronado por temas de los que marcan carreras, como “Granaíco”.
“Granaíco” es un anhelo de ida y vuelta. El lugar del que venimos y que abandonamos; un territorio ubicado en la memoria, pero también en la imaginación. Un espacio al que todos volvemos de manera onírica o real aun sabiendo que ya no es el lugar que fue, al igual que tampoco nosotros podemos serlo. “Cuanto más de ti me alejo más me quisiera quedar, y si a tu verita hoy me duermo sueño con otro lugar”, dice el estribillo.
El álbum, que además de “Granaíco” cuenta con las ya estrenadas “Mayos”, “Lirio” o “La despedía”, tiene en su versión de vinilo unas cuidadas artes a cargo del diseñador Albert Romagosa.
La banda, que el 10 de septiembre ya interpretó en la Nave Oporto canciones del álbum, en breve comunicará las fechas de su próxima gira, de las que ya han trascendido las de las Fiestas del Pilar y el Mercat de Música Viva de Vic.